10 textos que evidencian la valentía de El Faro
En el fallo que dio a conocer a El Faro como ganador del Reconocimiento a la Excelencia Periodística del #PremioGabo 2016, el Consejo Rector de la FNPI exaltó la valentía de los periodistas de este medio por apostarle a la investigación en uno de los países más peligrosos del mundo, El Salvador. Ese “rigor”, “integridad y compromiso con la verdad” serán reconocidos este 30 de septiembre en Medellín. Clic aquí para leer el fallo del Consejo Rector.
Para seguir homenajeando a estos aguerridos reporteros de El Faro hemos seleccionado 10 de sus textos, publicados los últimos siete años. Son reportajes y crónicas en contravía del mandato de escribir corto en la web y que moldean un retrato visceral de Centroamérica, por cuenta del desangre que deja la violencia de las pandillas, la corrupción estatal y los vejámenes sufridos por los migrantes en su camino hacia el sueño americano.
Charla
Los incómodos de El Faro
Carlos Dada (El Salvador), José Luiz Sanz (España) y Óscar Martínez (El Salvador), en conversación con Carlos Fernando Chamorro (Nicaragua) y Mónica González (Chile)
Viernes, 30 de septiembre
11 a.m. / Salón Restrepo – Jardín Botánico de Medellín
Entrada gratuita / Clic aquí para registrarte
Esta historia, publicada en agosto de 2012, narra los orígenes de la Mara Salvatrucha y la génesis de su rivalidad con la pandilla Barrio 18. Los autores Carlos Martínez y José Luis Sanz viajan al downtown de Los Ángeles, en Estados Unidos, para relatar la transformación de un grupo de adolescentes rebeldes de los años 80, aficionados al heavy metal e hijos de inmigrantes salvadoreños que huían de la guerra civil, en una temida organización internacional de criminales.
Esta es una de las historias más desgarradoras de la cosecha reciente de El Faro. Las lectoras pueden llegar a sentir, en carne propia, la violación a la que fue sometida una humilde jovencita del área metropolitana de San Salvador cuando tenía 19 años. A la chica, llamada Magaly, la violaron no menos de 15 pandilleros durante unas tres horas. Y su violación es también el retrato de los abusos sexuales que sistemáticamente sufren las mujeres en El Salvador.
El autor, Roberto Valencia, habló con Magaly dos años después de ese suceso y la encontró casada con un marido “enfermizamente conservador” y “proteccionista” e intentando tener su primer hijo, como “una salvadoreña más”, la definió Valencia. Aquí puedes ver la bitácora de ‘Yo violada’.
El Faro reconstruyó un operativo de la Policía salvadoreña en una finca, en contra de miembros de la Mara Salvatrucha, y encontró que los uniformados le mintieron a la opinión pública al informar sobre lo ocurrido el 26 de marzo de 2015.
Gracias a esta investigación periodística, El Salvador supo que aquella madrugada hubo ejecuciones sumarias, montajes en la escena del crimen y un muerto que no era pandillero. De hecho, estudios forenses demostraron que los ocho abatidos fueron acribillados y que los pandilleros no recibieron a los policías a tiros como dice la versión oficial.
Al mejor estilo de las road movie, este texto pasea al lector por la cárcel La Esperanza, donde las carencias convierten a los victimarios en víctimas. Quien lee esta historia tiene una foto bastante real del hedor, la comida desabrida y el hacinamiento de un penal construido para menos de 800 personas, pero en el que viven cinco mil.
En este viaje al infierno se conoce también a La Raza, el gobierno impuesto por los mismos internos y en el que la autoridad carcelaria salvadoreña no tiene mayor voz ni voto. Aquí La Raza es la ley y el orden.
Como El Faro no cubre hechos sino procesos y la violencia de El Salvador no está aislada de lo que ocurre en el resto de Centroamérica, este texto retrata la corrupción que corroe a la policía de Honduras: el país con mayor tasa de homicidios en el mundo.
La corrupción toma forma en este relato con la muerte de dos universitarios de la élite hondureña, asesinados por ocho uniformados, y por las denuncias de irregularidades al interior de esa institución, que le valieron la destitución a la jefa de asuntos internos de la Policía María Luisa Borjas.
Esta crónica hace parte de la Antología de Crónica Latinoamericana, compilada por el escritor colombiano Darío Jaramillo Agudelo y publicada por Alfaguara en 2012. Es la historia de un barrio de los suburbios de San Salvador, al que solo los lugareños suelen ingresar y que desde su nacimiento ha sido sinónimo de extorsiones, asesinatos o desmembramientos, por ser territorio de la pandilla Barrio 18.
En La Campanera los pandilleros imponen su ley: al comerciante que no les pague la renta lo matan o al que los traicione, según ellos. Eso le ocurrió al fotoperiodista franco español Christian Poveda, a quien balearon después de haberle permitido documentar la vida pandilleril por más de un año.
Este viaje en el lomo de La Bestia -trenes mexicanos que transportan mercancía- muestra los riesgos de mutilación, asaltos y violaciones, que corren salvadoreños, nicaragüenses, hondureños y guatemaltecos para atravesar más rápido México, en su travesía hacia los Estados Unidos.
El cronista Óscar Martínez se monta en el lomo del tren para intentar sentir la misma incertidumbre que sienten los migrantes durante los cinco mil kilómetros de viaje, especialmente porque son altas las posibilidades de encontrarse de frente con delincuentes comunes o miembros del crimen organizado. Al final, un trabajo que se ha convertido en referencia obligada al hablar de migración en Centroamérica y Estados Unidos. Aquí puedes ver la bitácora del trabajo ‘Migración’.
Este historia es un viaje por el sector La Arrocera, en el sur de México, uno de los territorios más inhóspitos que recorren los migrantes centroamericanos en su peregrinación hacia Estados Unidos.
El texto, como La Bestia de los migrantes, hace parte del especial sobre migración En el camino, autoría del cronista Óscar Martínez, recientemente premiado por la Universidad de Columbia por su “gran tenacidad” al investigar sobre crimen organizado y violencia. También es uno de los capítulos del libro Los Migrantes que no importan, que recrea la travesía que Martínez emprendió en 2009, desde el sur mexicano hacia el río Bravo, como si fuera un migrante más que anhela una vida mejor en territorio yankee.
Crónica ganadora en 2011 del Premio Ortega y Gasset, en la categoría periodismo digital, que entrega El País de España. Cuenta las aventuras y desventuras del único criminalista de la Policía de El Salvador.
A través del trabajo del ingeniero Ismael Ticas la muerte también tiene algo de belleza y aunque su labor pareciera inútil, porque cuando va a desenterrar un cadáver aparecen cuatro, cinco o hasta 10 que no esperaba, sigue poniéndole empeño. Lo hace quizá para darles respuestas a madres llenas de dolor, como a esa que lo llama a diario preguntándole si ya se sabe algo sobre su único hijo desaparecido. “Ya no aguanto más”, le suele decir la desesperada mujer.
En marzo de 2012 El Faro reveló el pacto, producto de unas conversaciones secretas, del Gobierno de El Salvador con los máximos líderes de las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18 para reducir los índices de violencia en ese país. Gracias a esa exclusiva, los salvadoreños empezaron a entender porqué las semanas previas a la revelación las cifras de homicidios habían alcanzado registros históricos: de 14 homicidios diarios a menos de cinco.
Este medio reveló que, como parte de ese pacto, 30 jefes de esas pandillas fueron trasladados a cárceles de menor seguridad, en las que podían comenzar a recibir visitas y tener contacto físico con los visitantes. También recibieron una oferta de miles de dólares del gobierno, según un informe de inteligencia policial. Clic aquí para conocer los ganadores del Premio de Periodismo Investigativo.
Sobre el Premio y Festival Gabo
Es convocado por la Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI), con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética, con inspiración en los ideales y obra de Gabriel García Márquez y en la dinámica de creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia. El Premio y el Festival es posible gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los grupos Bancolombia y SURA con sus filiales en América Latina.
Cómo asistir al Festival Gabo
LATAM, la aerolínea oficial del Festival, tiene 25% de descuento en tiquetes nacionales y 15% en internacionales para los interesados en asistir al Festival. Los descuentos aplican en rutas cubiertas por Latam. Más información aquí.
Festival Gabo en vivo
Podrás seguir la programación del Festival Gabo en streaming gracias a Telemedellín.
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